La mayoría de emprendedores se pasan el día pensando en conseguir más clientes y en cómo vender más. Pero la realidad es que piensan mucho en como vender más y luego no llegan a ninguna conclusión. Esto sucede debido a que se olvidan de algo muy importante, de su cliente, el cuál es el responsable de aportarnos beneficios. Si te olvidas de él y no lo tienes en cuenta a la hora de crear tus estrategias, estas serán un fracaso total. Para que veas de forma más clara esto, te lo voy a contar a continuación en forma de historia, para que así entiendas la importancia de esto.
Uno de los mejores vendedores de Coca Cola fue enviado a Arabia Saudi y volvió sin haber vendido ni una Coca Cola. Un compañero le pregunto: «Con lo buen vendedor que eres, cómo es que no has tenido éxito con los árabes?», con lo que el vendedor le comento: «Yo fui con todos mis argumentos de venta preparado para triunfar, pero cuando llegó la hora de la verdad, caí en la cuenta de que……. no sabía hablar árabe. Pero mi fuerza de voluntad hizo que no me detuviera, por lo que diseñé una estrategia basada en imágenes para que entendieran lo que vendía y las propiedades de la Coca-Cola.
Lo hice a través de 3 carteles: el primero mostraba a un hombre derrumbado por el cansancio en la arena del desierto, agotado y desmayado; en el segundo se veía a ese mismo hombre bebiendo una Coca-Cola; y, finalmente, en el tercero nuestro hombre está completamente repuesto, refrescado y es capaz de correr con total vitalidad por todo el desierto. Puse estos carteles por todo Arabia Saudi.»
Su compañero le comento: «Qué buena idea más buena. ¿Cómo es que no te funcionó y se dispararon las ventas de Coca-Cola?.», y este le respondió «Por mala suerte. Nadie me dijo que ellos lo leen todo de derecha a izquierda»
¿Sabes cuál es la moraleja de esta historia?
Que por muy buena que sea tu estrategia no te sirve de nada si realmente no conoces ni a tu cliente ni a tu mercado. En mi libro Marketing de Élite te dejo algunas herramientas muy potentes para conocer quien es tu cliente ideal y sobre todo como diseñar una propuesta de valor con un mensaje persuasivo que enamore a tu cliente.
Recuerda ha llegado la hora de rugir como un león.
