Te presentamos un artículo con algunos de los conceptos clave para obtener resultados.
Si estás familiarizado con los conceptos subyacentes, podrás manejarte de forma más eficiente. Por ejemplo, descubrirás estrategias más efectivas, o quizás te des cuenta de que estás invirtiendo mucho tiempo y energía en proyectos que no están produciendo los resultados que esperas. ¡Averigua si estás trabajando en cosas que no se valoran!
En tu mente
Todo parte de aquí. Lo que piensas es la clave para una vida que conduzca a la realización. Somos lo que pensamos. Vivimos la vida en función de cómo percibimos y estructuramos nuestros pensamientos dominantes. Un buen consejo es mejorar la calidad de nuestros pensamientos para conseguir darle un giro de 180º a nuestras vidas. ¡Hay que pensar y soñar a lo grande! Una nueva disciplina mental puede cambiar las dinámicas ordinarias y sintonizarlas con nuevos patrones de pensamiento más atractivos.
En tu boca
¿Cómo podemos expresar nuestros pensamientos? ¡Mediante el lenguaje! Gracias a nuestra capacidad para comunicarnos (generalmente de manera verbal), somos capaces de organizar nuestras ideas. Cuando nos hablamos a nosotros mismos, tenemos el poder de causar un impacto sobre nuestro estado de ánimo. A menudo, somos nuestros peores enemigos, ya que a través de nuestro diálogo interno nos saboteamos e impedimos que nuestros proyectos avancen. De nuevo, es necesario practicar un diálogo interior positivo que nos lleve a un lenguaje motivador, capaz de aportar resultados.
En tus manos
¿Eres de los que dice que va a hacer muchas cosas, pero a la hora de la verdad no hace nada? Todas nuestras acciones son más difíciles que las palabras. Si hablas mucho y no entras en acción, tu vida puede ser bastante decepcionante. ¡Solo las acciones aportan resultados! Debes conseguir que tus acciones destaquen por encima de lo que dices. Recuerda que no obtendrás resultados si no entras en acción.
Un entorno enriquecedor
La gente de la que nos rodeamos es un elemento fundamental que impacta sobre los resultados que buscamos. Esas personas con las que solemos estar son las que van a marcar los estándares que definan nuestras vidas. Si nos rodeamos de mediocres, seguramente obtendremos resultados mediocres. Sin embargo, las personas capaces de inspirar sacan lo mejor de nosotros mismos, nos ayudan a crecer consiguiendo buenos resultados. Es importante tener en mente que tú eliges con quién quieres estar.
Aprende leyendo a los mejores
Encuentra en un buen libro las palabras que te motiven. Las ideas de cualquier autor pueden ser el trampolín que necesitas para encender tus motores y ponerte en marcha. No hay alimento más poderoso que el que nutre tu mente, aquel que te inspira y te permite mejorar como persona. Te recomendamos que accedas a una buena colección de libros de desarrollo personal para avanzar con paso firme hacia el éxito.
Mens sana in corpore sano
“Mente sana en un cuerpo sano”. Esta cita del célebre autor romano Juvenal ha llegado intacta hasta nuestros días. Cuida tu organismo, porque es el único vehículo que te permite alcanzar tus objetivos físicamente. Si te falla el cuerpo, no podrás obtener resultados. Es capital que cuides tu cuerpo y que siempre cuentes con la energía necesaria para hacer tus sueños realidad mediante acciones reales. Come bien y procura hacer ejercicio de manera regular.
El espacio que te envuelve
Un ambiente ordenado y agradable puede marcar la diferencia. ¡Todo está en los detalles! Las cosas más pequeñas son capaces de causar un gran impacto en cualquier entorno: el aseo, unas plantas, la música adecuada, un poco de arte en las paredes, un buen asiento… pueden darle a tu espacio un toque espectacular. Invierte algo de tu tiempo en implementar tu entorno y seguro que consigues una buena dosis de productividad.
El tiempo es oro
Todo lo que tenemos, todo lo que se nos escapa es el tiempo. Esta materia prima se va agotando y es irremplazable. Si hay algo en lo que debes convertirte es en maestro en gestionar tu tiempo. Prioriza y saca el mayor partido posible a todo lo que consideres importante en tu vida. Todos sabemos que el tiempo vuela, pero debes ser tú quien dirija ese vuelo.
Centra tu atención en lo que importa
La mente humana tiene una habilidad de concentración unidireccional. Si nos centramos en las cosas buenas, no podremos prestar atención a las malas al mismo tiempo, y viceversa. Como consecuencia, debes enfocar tu atención en aquello que crees que te va a beneficiar más. Como cualquier otra habilidad, hay que entrenar este hábito para descartar todo lo negativo y poder centrarnos solo en lo positivo: tu perspectiva empezará a cambiar cuando detectes todas las grandes oportunidades a tu alcance.
No olvides tus valores
Puedes alcanzar el equilibrio en tu vida si actúas en armonía con lo que es realmente importante para ti. Tener siempre en cuenta tus valores fundamentales te ayudará a encontrar la plenitud. Hasta las decisiones más difíciles se ven desde otra perspectiva cuando se tienen claras las prioridades, y estas se vuelven ligeras gracias a unos valores bien asentados.
Esperamos haber podido ayudar con estos consejos sobre cómo conseguir mejores resultados, ya sea en lo profesional o en lo familiar.