“Destacar frente a mi competencia, que además me lleva años de ventaja en el mercado, lo veo muy complicado” . Esta es una de las típicas frases que me repiten una y otra vez las personas que están interesadas en mis servicios. Pesimismo y sentimiento de inferioridad en estado puro.
Pero déjame decirte una cosa: El camino recorrido o la antigüedad de la empresa no sirve de nada si no hay una buena estrategia de por medio.
Enfocar tu marca hacia lo que verdaderamente funciona (y no a lo que crees que la gente quiere) o contar con una buena estrategia a la hora de realizar una campaña e invertir (sí, sin inversión no hay ventas, y recuerda: estás invirtiendo en tu negocio, no en unas zapatillas) son las llaves que abren la puerta hacia el éxito.
Ponte gafas de sol porque vas a brillar más que el oro con estas siete claves que te harán ser irresistible frente a tu competencia:
Las cosas bien claras, nada de rodeos.
Lo primero que debes hacer es tener en cuenta cuál será la oferta que vas a ofrecer a tus consumidores, ponte en su lugar y desarrolla la promoción que a ti te gustaría conocer.
Otra cuestión que siempre, siempre, siempre tenemos que tener en cuenta (y que casi nadie hace) es usar un vocabulario acorde al de tu consumidor, ya que él no es especialista en el sector.
Un descuento NO ES UNA OFERTA IRRESISTIBLE.
¿Cuántas veces has pensado que rebajar un producto te hará vender más? Siento decirte que estás completamente equivocado.
Seamos objetivos: a todos nos gustan las rebajas (y más si son grandes), pero recuerda que el producto que tú estás ofreciendo también lo ofrece tu competencia, y puede que sea incluso más económico.
Para crear una oferta irresistible primero debes de desear tú mismo el producto, debes prestar la misma atención o mimo que deseas que preste el cliente.
El valor de esa oferta irresistible se percibe.
Cuando hablamos de valor no nos referimos al precio, sino al valor que aportará a la persona que lo adquiera.
Por ejemplo: El Corte Inglés.
El Corte Inglés hace grandes inversiones en campañas de marketing, sobre todo en fechas destacadas como San Valentín y Navidad.
Bien, como todos sabemos, los precios de esta multinacional no son precisamente baratos, y además, la competencia tiene muchos de sus productos a un precio inferior. ¿Y por qué sigue siendo una de las empresas que más facturan en España? Te preguntarás.
El Corte Inglés aporta valor de la siguiente forma: Estás pagando un producto dos veces más caro que en la competencia, pero tienes la seguridad de que si a los seis meses o a los dos años de adquirirlo se estropea, te lo cambiarán por uno completamente nuevo.
Entonces, ¿cuál es el valor que hace que las ofertas de esta marca sean irresistibles? El servicio.
La oferta irresistible no es universal, sino para tu cliente ideal.
¿Para todo el mundo? ¿Eso se come? Tu oferta debe ir dirigida únicamente a las personas que estás seguro de que van a adquirir tu producto o servicio.
Por ejemplo: A la hora de crear una campaña publicitaria promocionando un producto y nuestro CTA es: “Sólo disponible para las primeras 10 personas”, nos aseguramos de que esas diez personas SÍ están interesadas verdaderamente en nuestro producto.
¡Beneficios, beneficios!
No, no estamos hablando de dinero jajaja. Estamos hablando de que otra forma de aportar valor es aportar beneficios a nuestro cliente potencial.
Atibórralos de las ventajas de las que disfrutará contratando lo que ofreces. Cuéntale hasta el más mínimo detalle, cada ventaja de tu producto y no te dejes ninguna en el tintero. Destaca siempre sus cualidades frente a sus desventajas, porque para nosotros, nuestro producto no tiene desventajas.
Usa la psicología
Métete en la cabeza que la única forma de seducir a tu cliente ideal es psicológicamente. Saca toda tu artillería y ponle la misma ilusión que cuando ibas a realizar tu primera venta.
Una de las estrategias que más (y mejor) funcionan es crear sensación de escasez.
Por ejemplo: Imagina que vendes camisetas, y te quedan en stock 10 unidades, pero quieres que al venderlas se genere sensación de exclusividad. Para ello, a la hora de realizar nuestra campaña comunicaremos que sólo nos quedan 5 unidades.
¿Qué conseguimos con eso?
- Que a nuestro cliente le genere sensación de urgencia por comprarla.
- Que sienta que tiene algo exclusivo, porque se está acabando el producto, y eso significa que es de las pocas personas que lo tendrán.
- Que corra la voz de que la camiseta es de “x” tienda y que sus amigos o conocidos vayan a comprobar si hay más unidades (y entonces nosotros ofreceremos otro de nuestros productos siguiendo la misma estrategia).
Ve siempre un paso por delante.
En los tiempos que corren actualmente, es esencial aportar un valor al que antes no se le daba importancia: hacer ver a tu cliente que te preocupas por él. ¿Cómo?
- Facilidades de financiación.
- Garantías: Cancelación gratuita en el mismo día, devolución del producto sin moverte de casa, etc.
Ofrece a tu cliente lo que está buscando: calidad, compromiso y seguridad. Si tienes esos tres factores, prepárate para triunfar.
¡Hasta aquí el artículo de hoy! Espero que os haya sido de muchísima ayuda, si tienes cualquier duda, ¡no dudes en escribirme!